Para liderar, es importante empezar por uno mismo: haz un FODA personal y descubre fortalezas y debilidades. El siguiente paso será seguir uno de los modelos de liderazgo adecuado a los rasgos propios y la situación particular. A continuación, desarrollamos 4 tipos de liderazgo y 5 estilos que pueden aplicarse. Sigue leyendo y conoce sus características, ventajas y desventajas.
Liderar no es lo mismo que dirigir. Mientras que dirigir implica controlar, administrar, ejercer la autoridad, evaluar, todo con una visión a corto plazo, el liderazgo se relaciona con innovar, tener enfoque hacia el cambio, inspirar, avanzar hacia la visión, tener presente la misión, contar con gestión estratégica, crear valor y generar oportunidades.
Existen 4 tipos de liderazgo que se basan en la cantidad de dirección y/o de apoyo que ofrecen los líderes al equipo, considerando su grado de madurez. No existe uno ideal para todos los casos, sino que depende de cada situación.
1. Dirección: para los que recién se incorporan, que necesitan pautas claras o que tienen poca experiencia e iniciativa. Se basa en:
2. Persuasión: para el que a pesar de conocer poco los procedimientos, muestra motivación e iniciativa. Se basa en:
3. Participación: para el personal motivado y capaz de asumir responsabilidades.Se basa en:
4. Delegación: para aquellas personas con talento, experiencia, capacidad y motivación.Se basa en:
Los estilos de liderazgo hacen a la forma de ser del líder, quien no necesariamente es 100% de uno u otro estilo, sino que podría combinar características de varios de ellos. A veces, la justa medida está en la combinación de estilos.
Los autoritarios (también llamados autocráticos) son aquellos líderes que tienen dominio y control sobre sus pares. Este es un estilo especialmente favorable en situaciones en las que la organización y los equipos necesitan tener claro el camino que se va a seguir, como en una crisis. No es útil con equipos formados por personas expertas.
Por el alto grado de participación que fomenta en las personas, implica confianza, respeto y compromiso. Es un buen estilo para definir el rumbo y considerar la opinión de expertos. Puede conllevar a reuniones largas y a la dificultad en obtener el consenso. No tiene sentido cuando el equipo carece de experiencia.
Los líderes democráticos reciben con los brazos abiertos las opiniones de todos e incentivan la colaboración. A pesar de que cuentan con la última palabra, estos líderes reparten las responsabilidades de tomar las decisiones entre todos.
Fomenta que las personas tengan claridad hacia lo que se espera de ellas. Funciona muy bien cuando los miembros del equipo están receptivos y abiertos al desarrollo de sus aspectos de mejora. Si las personas se resisten al cambio en sus acciones, es un liderazgo complejo de instaurar.
Los liderazgos al estilo “coaching” resultan convenientes cuando el líder es creativo, tiene buena predisposición para colaborar y puede brindar opiniones concretas. También es importante que el líder sepa cuándo hacerse a un lado y darle autonomía a la persona.
Estilo útil para los procesos de gestión del talento y para procesos rápidos de integración e inclusión en una organización. Se enfoca en el desarrollo del potencial de las personas. Un líder mentor es un ejemplo de gran productividad, rendimiento y calidad. Se supone que los miembros del equipo deben seguir sus pasos.
Este tipo de liderazgo es eficaz cuando el líder establece requisitos claros y motiva a los miembros del equipo a cumplir con las fechas de entrega.
Buen estilo de liderazgo para entornos formados por expertos. Fomenta la autogestión del equipo. Si el equipo no es maduro para asumir su propia autogestión, será un estilo que generará muchos problemas.
Estos líderes ofrecen muy poca orientación al grupo y otorgan total libertad a los miembros del equipo para tomar decisiones. Se separan del grupo y eligen no participar ni interrumpir durante el curso de un proyecto.
Para elegir entre los modelos de liderazgo, pregúntate lo siguiente: ¿con cuál has sentido una mayor identificación? o ¿cuál usarías sin pensarlo demasiado? Entiende las características, ventajas y desventajas de cada modelo, y asume un rol de líder que ayude a llevar al equipo y la organización al éxito esperado.